Señor, mi Dios, pienso en ti y confío en ti. Ha sido un día fuerte, pero has estado a mi lado. He visto tu mano orar y te lo agradezco de corazón. Gracias porque me sostienes en medio de mis luchas. Necesito descansar, Señor, dame tu paz. Concedeme el sueño reparador que necesito. Pongo mi familia y nuestros problemas en tus manos. Gracias porque podré descansar sabiendo que tu estás obrando y que nos concederás la victoria para tu gloria y honra. En el nombre de Jesús, amén.