Quien ha encontrado un amigo ha encontrado un tesoro.
Los amigos son esos compañeros de vida, con quienes compartimos muchos momentos memorables, felices y divertidos, con quienes sonreímos, lloramos y suspiramos, son quienes en esos momentos más difíciles nos brindan comprensión, cariño y apoyo, ellos se convierten en esas personas de valor para nosotros y por eso muchas veces decimos que los amigos son esa familia que elegimos y es que desde muy pequeños los amigos tienen un papel fundamental en nuestra vida. En las relaciones de amistad se practican valores como la sinceridad, la lealtad y el compromiso y uno de los lazos más importantes de la amistad es el amor incondicional: creer y amar a la otra persona sin importar lo que pase. Estamos en el mes donde celebramos la amistad por eso invitamos a Alejandra Molina, Coach de vida y familiar @deadentrohaciaafuera_am y aparte de exaltar el gran valor que tiene la amistad también nos invitó a conocer algunas señales que nos ayudan a identificar cuando una amistad es verdadera:
NO HAY EROS: El Eros es la parte más pasional de nuestra afectividad y en la amistad permanece concentrada no en buscar la intimidad física, ni la unión física, ni del cuerpo, sino la Unión de los corazones. Goza con la compañía, de su conversación y No se focaliza en gozar del cuerpo.
NO HAY ENVIDIA: Tristeza por el bien ajeno, ese sentimiento no existe. Disfruta por el bien del otro como si fuera el bien propio. Se goza en el éxito del amigo como si fuera su propio éxito. Y sufre la humillación del amigo como si fuera propia.
NO HAY RIVALIDAD NI COMPETENCIA: Los amigos no compiten, se complementan, se ayudan. No se experimenta la necesidad de ser mejor, ni de superarlo en algo. Con el amigo se aprende, se gana o se pierda y da exactamente lo mismo.
NO HAY INTERÉS: Hay personas, aparentemente amigas que están junto a ti porque te va bien, comparten los beneficios que le da tú amistada, pero apenas no te va también, se irán y te dejarán. La amistad verdadera comparte la cualidad del amor en caridad.
ABRE UN PUENTE HACIA DIOS Y HACIA LO ESPIRITUAL: Si una amistad no te abre hacia lo espiritual, no es una amistad verdadera. La amistad trasciende así misma y te abre hacia lo sobrenatural, a Dios. No te deja en la tierra. Una amistad verdadera te abre el cielo, te hace descubrir a Dios. Te habla de Dios y te lleva a Él, no te separa de Él.
Nuestra invitada también agrego que: “Si una persona que se llama tu amigo y te desvía del bien, te enseña lo malo, fomenta la maldad en ti, te aleja de la virtud de Dios, te aleja de lo honesto o de lo que te hace más persona y libre, será de todo menos tu amigo” .
Aprendamos entonces a valorar los buenos amigos, pues su presencia en nuestras vidas es un auténtico tesoro.
“EL AMIGO VERDADERO ES UN REFUGIO SEGURO Y QUIEN LO ENCUENTRA, ENCUENTRA UN TESORO” ECLO 6, 14
Si quieres saber más acerca del valor de la amistad te invitaos a visualizar este capítulo de ¿Qué Pasa En Casa?
Por: Viviana Arango