Regina Coeli

18 de Abril del 2022

En la liturgia el Papa Francisco nos sigue hablando de Jesús Resucitado, obrando de dos maneras en su aparición con las mujeres que fueron al sepulcro y es tomado como un regalo para vivir la Pascua. Primero les dice “No tengáis miedo” (v. 10), el Señor nos invita a salir de la tumba de nuestros miedos, de aquellas cosas que nos entierran y no nos permiten avanzar. Él ha muerto por nuestros pecados y no hay nada a lo que debamos temer, porque cuando buscamos la raíz de nuestros miedos, realmente le tenemos miedo a la muerte, a desvanecernos, a la enfermedad propia o de los seres queridos, pero Jesús ha vencido la muerte y es quien nos dice que abandonemos aquello que nos atormenta porque Él está siempre con nosotros. 

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Imagen extraída de la página oficial del Vaticano.

En segundo lugar nos hace una invitación para que lo anunciemos “la alegría de la Pascua no es para guardarla para uno mismo. La alegría de Cristo se fortalece al darla, se multiplica al compartirla.”  menciona en el Ángelus el Santo Padre. El secreto está en anunciar para vencer el miedo, porque quien es fiel a Dios, tiene fe y supera cualquier temor. Estamos llamados a evangelizar y expandir la Palabra. 

El Papa plantea que hay dos señores: Dios y el dinero, y acá está la falsedad en el servicio, servir al dinero nos corrompe, nos hace retroceder y lo arruina todo. Adorar al dinero es una tentación cotidiana y Jesús solo quiere salvarnos de aquello que no nos permite avanzar. Nos escandalizamos con el engaño que encontramos en la sociedad pero no le damos nombre a nuestra propia falsedad, no la aceptamos ni la entregamos a luz de Dios. Él quiere sacar aquella oscuridad para hacernos más transparentes y libres. 

“Que María, la Madre del Resucitado, nos ayude a superar nuestros miedos y nos conceda la pasión por la verdad.” finaliza el Papa Francisco. 

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