El 8 de diciembre, día de la Inmaculada Concepción de María, un dogma de la Iglesia católica proclamado en 1854 por el Papa Pío IX, en el cual se declara a María libre del pecado original desde su concepción. Este dogma explica que María es la única persona en la historia de la humanidad que nació sin pecado original, Dios pensó en María para ser su madre incluso antes de nacer.
“Llena de gracia”, expresión que utiliza el arcángel Gabriel para referirse a la madre de Dios, que fue redimida del pecado original desde que fue engendrada en el vientre de su madre.
En el primer país en el que se celebró el Día de la Inmaculada Concepción fue en 1644 en España para rememorar lo sucedido en la Batalla de Empel, un acontecimiento que se dio entre el 7 y el 8 de diciembre de 1585 cuando el Tercio del Maestre de Campo Francisco Arias de Bobadilla combatía en el monte Empel, los españoles se enfrentaban en condiciones adversas.
Una noche un soldado español se encontró con una imagen que reflejaba la Inmaculada Concepción de María. A la mañana siguiente, gracias a un viento inusual el río Mosa se había congelado al que tuvieron que huir marchando sobre el hielo.